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Vuelve La Bohème Al Liceu

Vuelve La Bohème al Liceu

Una de las obras más queridas del repertorio operístico, La Bohème, vuelve al Gran Teatre del Liceu del 14 de junio al 2 de julio, casi cinco años después de la última representación. Esta vez, bajo la dirección escénica de Àlex Ollé, artista residente del Teatre durante los próximos 4 años. Ollé presenta una relectura de la obra de Puccini y nos sitúa en un barrio popular en el extrarradio de una gran ciudad. En un contexto dominado por los efectos de la industrialización, la preeminencia de los valores burgueses y un clima intelectual monopolizado por el positivismo laico, materialista y científico, la obra acaba siendo un canto a la vida en la que también se habla de la fragilidad de la felicidad. En el libreto de Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, basado en Scenes de la vie de bohème de Henri Murger, los personajes sortean las dificultades económicas y las inclemencias del tiempo con humor e ilusión. La historia de amor trágica entre uno de ellos, Rodolfo, aspirante a poeta, y Mimì, una vecina bordadora, articula un camino donde la pasión, la juventud, el arte y todas las emociones que dan sentido a la vida y a la muerte se fusionan.

Anita Hartig, Maria Teresa Leva, Adriana González –Mimì-, Atalla Ayan, Giorgio Berrugi –Rodolfo-, Valentina Nafornita i Katerina Tretyakova – Musetta-, Roberto de Candia i Damián del Castillo – Marcello – pondrán voz a algunos de los protagonistas que recuerdan con nostalgia su pasado. Un elenco dirigido por el maestro Giampaolo Bisanti y que también cuenta con la participación del Cor de Cambra del Palau de la Música Catalana; Veus – Cor infantil Amics de la Unió y la Orquestra Sinfónica y Coro del Gran Teatre del Liceu.

En la producción que se presenta ahora en el Liceu, estrenada en 2016 en el Teatro Regio de Turín, Àlex Ollé decidió que la mejor manera de representar la obra no era forzando la abstracción o el maximalismo tecnológico, dos recursos que forman parte de su estilo, sino volviendo a la crudeza del naturalismo intrínseco. La bohème de Ollé, pues, a pesar de que presenta detalles actuales -el poeta Rodolfo escribe en un ordenador portátil, por ejemplo-, no rehúye el fondo del paisaje ni de la historia original. Fiel a la letra y al espíritu de la obra, Ollé propone una versión que recrea el ambiente miserable, aunque lleno de ilusión del París bohemio, y el contraste con el lujo de la ciudad opulenta que se reúne para cenar en el moderno café Momus. Como consecuencia, el desarrollo de la obra para una gran atención al detalle. En La bohème, y especialmente en el primer acto, hay acciones que pasan fuera de la sala de Rodolfo y Marcello: Ollé opta por ensanchar el espacio, abrir el plan y mostrar también los pisos superiores, la puerta de entrada, la calle. De este modo, el ambiente de París se abre y se muestra más completo, más perfilado, natural y realista.

Fotos: ©Stela_Salinas y ©Yasuko Kageyama

Más información:

liceubarcelona.cat

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