
SoundLink Plus Portable o el arte de la moderación sonora
ISRAEL DAVID MARTÍNEZ JUN. 28, 2025 (Fotos: @press-music.com)
Hay algo casi ceremonial en sostener el nuevo Bose SoundLink Plus Portable Speaker. Su carcasa de aluminio pulido —con líneas limpias, frías al tacto— recuerda más a un objeto de diseño escandinavo que a un mero altavoz portátil. En un mercado que insiste en lo colorido y lo llamativo, Bose elige el lenguaje de la contención. Sobriedad, peso y una promesa de durabilidad que se siente incluso antes de sonar la primera nota.
No obstante, el SoundLink Plus no pretende seducir por la mera apariencia. Su vocación es, como ha sido norma en la casa Bose, la de transformar cualquier espacio cotidiano —terraza, picnic, salón improvisado— en un escenario sonoro digno. Para ello se apoya en un perfil acústico de graves profundos y bien controlados, con una potencia que sorprende para su tamaño. La escena, eso sí, es estrictamente monofónica. Nada de sonido estéreo, ni de procesamiento espacial artificial. Es un audio directo, con personalidad robusta y cierta calidez analógica, que privilegia la honestidad por encima del artificio.
Su batería cumple la promesa de las 20 horas con la misma sobriedad con que el diseño evita florituras. No hay juegos de luces ni comandos de voz integrados. El altavoz se carga por USB‑C y devuelve el favor cargando tu teléfono si hace falta. Hay algo casi minimalista en esta bidireccionalidad, como si Bose insistiera en recordarnos que la portabilidad debe ser un intercambio, no una concesión.
En un mundo regido por integraciones inteligentes —Alexa, Google Assistant, ecualizadores personalizables—, el SoundLink Plus se mantiene en su lugar. Su conectividad se limita al Bluetooth, sin concesiones al Wi‑Fi. El control es estrictamente físico. No pretende ser tu asistente personal, sino un auténtico instrumento. Esa elección le acarrea detractores —su precio de 280 euros puede parecer algo elevado frente a opciones más versátiles—, pero también le otorga una honestidad conceptual digna de reconocimiento.
Ante todo hay que subrayar su contundencia de graves y la nitidez a volumen alto. Pero también advierten de su límite. Quienes busquen un altavoz para escuchar música clásica con amplitud de escena o separar instrumentos con precisión milimétrica pueden decepcionarse. No es un producto para el audiófilo obsesivo, sino para el amante de la música que quiere un sonido lleno y confiable en cualquier situación.
En el terreno competitivo, el SoundLink Plus ocupa un curioso punto intermedio. Frente al Flex, más barato y ligero, ofrece volumen y presencia. Frente al SoundLink Max, más grande y estéreo, es más transportable. Esa franja intermedia no es un accidente, es el verdadero argumento del Plus. El oyente ideal de este altavoz es quien valora la calidad pero no quiere cargar con un mamotreto; quien sabe apreciar el equilibrio entre potencia, duración de batería y diseño sin concesiones.
El Bose SoundLink Plus Portable Speaker no intenta revolucionar. Su mérito está en recordarnos el valor de lo bien hecho. Es el altavoz de quien prefiere la precisión a la fanfarria, la sobriedad a la moda, la compañía serena de la música a su constante reinvención. Y en un tiempo que celebra lo fugaz, no es poca cosa ofrecer algo que parezca construido para durar.